Brackets en Madrid

¿Qué son los brackets?

Los brackets son pequeños aparatos que se colocan en los dientes para moverlos gradualmente hacia su posición correcta. Están unidos a los dientes mediante un adhesivo dental y conectados con un alambre que se ajusta periódicamente. Los brackets pueden ser de diferentes materiales, como metal, cerámica o zafiro, adaptándose a las necesidades del paciente.

Tipos de Brackets

Dependiendo de las necesidades de cada paciente, hay diferentes tipos de brackets que se pueden utilizar.

Brackets Metálicos

Son los más comunes y económicos. Hechos de acero inoxidable, son muy duraderos y eficaces, aunque menos estéticos.
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Brackets Estéticos

Hechos de un material similar al esmalte dental o zafiro, son menos visibles que los metálicos, lo que los hace una opción popular para adultos que buscan una solución más estética.
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Brackets linguales

Colocados en la parte posterior de los dientes, son completamente invisibles desde el exterior, lo que los convierte en una excelente opción para quienes no quieren que se vean los brackets.
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Beneficios de los Brackets

Estética Dental

Dientes alineados crean una sonrisa más atractiva y natural.

Mejor Mordida

Al corregir la mordida, se facilita la masticación y se previenen problemas en la articulación temporomandibular (ATM).

Prevención

Un alineamiento adecuado previene el desgaste irregular de los dientes, las caries y las enfermedades de las encías.

Las preguntas más frecuentes

¿Cuánto tiempo se deben usar los brackets?

El tiempo de tratamiento con brackets varía dependiendo de la complejidad del caso, pero generalmente puede durar entre 18 meses y 3 años. Sin embargo, después de la eliminación de los brackets, es necesario usar retenedores para asegurar que los dientes se mantengan en su nueva posición.

  • Higiene oral: Es crucial mantener una higiene oral adecuada con cepillos de dientes especiales para ortodoncia y hilo dental para evitar problemas de encías y caries.
  • Alimentos a evitar: Se deben evitar alimentos duros, pegajosos o difíciles de masticar, como caramelos, chicles o nueces, para evitar dañar los brackets.
  • Revisiones regulares: Visitar al ortodoncista cada 4-6 semanas para asegurarse de que el tratamiento avanza correctamente.

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Al principio del tratamiento, es común experimentar molestias o dolor leve debido al ajuste de los brackets y el alambre. Esto suele durar unos días y desaparece a medida que el tratamiento avanza. Durante los ajustes periódicos también puede haber algo de incomodidad.

Sí, después de quitarte los brackets, es necesario usar retenedores para mantener los dientes en su nueva posición. Esto ayuda a evitar que los dientes se muevan nuevamente a su posición original.

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